LA UNNE ASESORARÁ A PRODUCTORES DE EMPEDRADO EN EL USO DEL AGUA

Profesionales de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) llevan a cabo, desde hace tiempo, un proyecto de control de calidad de agua en explotaciones agropecuarias, a fin de asesorar a pequeños productores en el uso adecuado de este recurso.

El proyecto se realiza en el marco del programa "Universidad en el Medio" y tiene por objetivo promover el uso adecuado del agua, tanto para evitar problemas en la salud humana, como para potenciar el cuidado del ambiente. La iniciativa, que se desarrolla hace algunos años, ha brindado asistencia a algunas localidades de la provincia de Corrientes, y actualmente se está trabajando con pequeños productores de la zona de El Colorado y Villa Dos Trece, de la provincia de Formosa. A partir del año próximo se trabajará en las zonas hortícolas de Capital, San Luis del Palmar, Empedrado y San Cosme, Corrientes, cuyos productores operan en el Mercado Central de Corrientes.

Dentro de diversas actividades que se ejecutan, se extraen muestras de agua de las fuentes que los productores utilizan para riego o para consumo. Las muestras se trasladan al Servicio de Análisis de Agua de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNNE, donde se realizan los análisis bacteriológicos y físico-químicos que permiten evaluar la calidad del vital líquido.

"Los estudios del agua en el área rural son muy importantes, pues la mayoría de los productores destina la misma fuente de agua para ambos objetivos: riego y consumo personal" explicaron a El Universitario las ingenieras agrónomas Gloria Martínez y Silvia Rodríguez, responsables del proyecto.

Las fuentes utilizadas no son sometidas a procesos de potabilización, habitualmente se las consume sin realizar estudio alguno, y es frecuente que no sean aptas para el consumo humano.
Desde el aspecto productivo, indicaron que la calidad del agua es un paso inevitable al emprender cualquier proyecto agrícola-ganadero, ya que un uso continuo de aguas de baja calidad, sin un manejo adecuado, puede provocar un deterioro de la calidad de los suelos cuya recuperación puede llegar a ser técnicamente dificultosa y en ocasiones económicamente inviable.

"Es importante que los productores puedan conocer las características del agua que utilizan y reciban asesoramiento para realizar un adecuado manejo de la misma" resaltó la ingeniera agrónoma Martínez sobre la motivación del proyecto. Acotó que a través de charlas, cursos, talleres y demás acciones se busca demostrarles a los productores que existen vías accesibles para mejorar la calidad del agua que consumen y de la importancia de darle importancia al tema.
Al respecto, comentó que a los productores se les recomienda posibles soluciones a los problemas que tienen con el agua, entre las que se incluyen en ocasiones algunas formas caseras de recuperar el agua.

Por su parte, la ingeniera agrónoma Rodríguez señaló que en la región existen zonas con distintos tipo de agua y con distintos grados de calidad, por lo que en cada lugar donde se concreta el proyecto deben conocer el agua y que destinos se le dan, así como otras cuestiones ligadas al consumo. La calidad del agua influye tanto en la persona que la consume, así como en el suelo, en la producción agrícola que se riega, y también en el ganado.

"El agua dulce es un recurso natural cuya importancia dentro del ecosistema es un factor clave en todas las actividades realizadas por el hombre. Lograr un ingreso estable y creciente, puede alcanzarlo conservando los recursos y cuidando la calidad del medio ambiente" expresó.
Las investigadoras subrayaron el hecho que la mayoría de los pequeños productores valoren la asistencia profesional, lo cual se ve reflejado en la cantidad de asistentes a los encuentros realizados dentro del proyecto.