LOS COBARDES NO REINAN

Voy a responder a algunos de los comentarios, fundamentalmente a los relacionados con la Carta Orgánica porque son inquietudes que tienen los que comentaron, anónimamente, y también yo.

Ante el anonimato quiero pedir un poco de cordura. La idea de que un lector pueda comentar sin ningún tipo de filtro fue planteada desde un principio por nosotros. Creímos que sería una forma de no censurar a nadie y hacer más fácil la forma de opinar para todos. Nuestra meta es cambiar algunas cosas en nuestra “mentalidad empedradeña” una de ella es la de decir cualquier cosa sin hacernos cargo. Todos los artículos, esto ya lo expresé anteriormente, están firmados por Miguel Ángel Silvero (algunos hasta tienen mi número de documento) y están en este blog gestionado por personas que responden por lo que aquí se escribe.

Algunos comentarios me parecen completamente fuera de lugar. Insultando a familiares de funcionarios, a vecinos nuestros y, a nosotros mismos. No seamos cobardes y asumamos nuestras opiniones. Simplemente los invito a hacernos cargo. Es la única manera de cambiar lo que tanto criticamos. Por ejemplo decir que “son todos chorros como sus padres- anónimo.”, es tan cobarde como sacarle un chupetín a un chico. Espero que nadie se sienta molesto con lo que hoy pido. Este es un espacio para todos, lo mejor que nos puede pasar es tener un espacio para participar, comentar, opinar libremente, pero haciéndonos cargo, o simplemente vamos a tener que tomar la decisión de filtrar lo que se postea. No es la intención, pero me duele leer un artículo firmado por mi lleno de comentarios anónimos insultando a quien se cruce por la vida.

El vocabulario es tan bello y extenso que podemos decir infinidad de versos románticos o, también. amenazar vilmente a nuestros hermanos. Deseo que esto se revierta y los insultos, de ahora en más estén firmados, por lo menos con un seudónimo. Cualquier persona que alguna vez gestionó un blog sabe que en cada comentario queda la información necesaria para saber de quien es aunque sea anónimo. La solución sería comenzar a poner nombres, pero somos grandes y libres. Bueno ahora lo otro.

Las coimas y el rumor. Si el río suena… Para la actual gestión que el viceintendente sea Presidente del Concejo Deliberante fue el punto crucial. No hay que ser muy inteligente para entender esto. Aseguro, jugándome el pellejo con nombre y apellido, que hubo un intento de coimas. No se preocupen amigos míos, el tiempo con su voraz sutilidad nos dirá quienes fueron los que “arreglaron”. No se arriesguen con nombres, háganme caso, confíen.

Sobre lo que los convencionales dijeron en campaña y, supuestamente, hicieron otra en la elección. Sugiero a mis amigos comentaristas que busquen algún tipo de archivo que corrobore lo que dicen-y lo que dicen también Luis Riquelme y José Cheme- los medios deberían tener archivo, tiene que haber alguna boletita de campaña que diga eso si en verdad lo prometieron.

Fíjense como yo les pido a ustedes lectores que sean responsables de lo que dicen cuando el ejemplo de nuestros funcionarios es el de acusar abiertamente sin mostrar ningún documento. No seamos iguales a los que criticamos que su mal desempeño nos sirva de ejemplo.

Esos son los nuevos políticos, pregunta un amigo por ahí. Recomiendo involucrarse en política para cambiar la realidad. Se cambian de adentro las cosas. Lo superficial nos dejó como estamos ahora: viviendo la fantasía del “éxito del verano”, los invito a visitara el verano de la gente del Bajo Lomas.

Al que habla sobre los “forasteros” le digo que su querido pueblo no le pertenece. Es de todos, hasta para los forasteros. No quiero defender Edwin -sabe hacerlo sólo-. “Siempre vienen y se quedan todos estos chantas y prófugos que les echan de todos lados y vienen acá y se hacen los intelectuales y tontos”. Hace algunos años uno de esos forasteros era yo, Miguel Ángel. Jamás nadie me echo de ningún lado, tampoco jamás me asumí como intelectual, tampoco hice alarde por pronunciar las “S” cuando me salían, ahora ya no más.

Algo igual a este comentario escuché el otro día dirigido hacía un muchacho que vino de la provincia de Buenos Aires a vivir por estos lares. El pibe dijo que la calle era un basurero, al minuto un hombre le contesta “andate”. No creo que sea la forma. La tierra es de todos, no debería tener dueño. Todos tenemos derecho a hacer lo que queramos, a expresarnos libremente, pero siempre asumiendo las consecuencias de esto.

Señores, amigos míos, los invito a cambiar. No podemos ser lo mismos. Tenemos que aprender a asumir lo que nos toca en cada lugar. Abandonemos la cobardía de gritar detrás de una piedra. Aprendamos de los héroes que nos dio Corrientes desde todos sus puntos. Demos la vida por lo que creemos, el reino de la igualdad no es apto para cobardes.

Miguel Ángel Silvero 31796720.